Caminamos.. tras los pasos de Jesús: ARTÍCULOS ERE

Qué aprendemos en clase de religión y moral católica?

¿Qué aprendemos en clase de religión católica?

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El Dios fiel mantiene su alianza (DT 7, 9)

Julia Gutiérrez Lerones, delegada de enseñanza

El Dios fiel mantiene su alianza es un documento publicado por la Conferencia Episcopal Española recientemente que nos concierne como profesores de religión y como miembros activos en la Iglesia y en la sociedad.

Se trata de un “Instrumento de trabajo pastoral sobre persona, familia y sociedad ofrecido a la Iglesia y la sociedad española desde la fe en Dios y la perspectiva del bien común” en el que, entre otras propuestas, los obispos invitan al mundo cultural, educativo y a toda la sociedad civil a la preciosa labor de "Promover condiciones culturales que faciliten a todos los hombres alcanzar su plenitud en todas sus dimensiones: material, afectiva, psicológica y espiritual, y que esos mismos hombres se comprometan, a su vez, con el bien común. Colegios y universidades han de orientarse a la generación de conocimiento científico y a la formación de personas orientadas al bien, la verdad y la belleza" nº. 86, e.

Los profesores de religión y moral católica estamos invitados a seguir estas directrices en clase, creando el ambiente propicio para educar en el bien, la verdad y la belleza que identificamos en la persona de Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre, que pasó por el mundo haciendo el bien, cuyo mensaje de Salvación y Liberación se dirige a la persona en toda su integridad. El mismo Currículo de religión y moral católica señala que “la enseñanza de la religión forma parte de la propuesta educativa necesaria para el pleno desarrollo de la persona”.

En el buen hacer de nuestros profesores, los alumnos tienen la oportunidad de alcanzar esa madurez humano-cristiana a través de los tres tipos de aprendizajes que definen la educación integral que son: -culturales, -sociales y éticos y -vitales y de sentido, así como las tres áreas de aprendizaje: -personales, -sociales y -profesionales. Todos ellos son ámbitos que la nueva ley educativa propone para que todas las áreas o materias los tengan en cuenta en los procesos de enseñanza/aprendizaje.

Para llevar a cabo esa formación integral, el Currículo de religión y moral católica se articula en base a DOS EJES FUNDAMENTALES reflejados en la estructura de los saberes básicos (contenidos) que han de ayudar a alcanzar progresivamente las 6 competencias específicas de nuestra asignatura que a su vez deben promocionar las 8 propuestas por la Unión Europea; estos son:

1. LA FORMACIÓN INTEGRAL DE TODOS LOS ASPECTOS QUE CONFIGURAN A LA PERSONA como son la inteligencia, los sentimientos y emociones, la voluntad, la conciencia y la fraternidad, valores de la estructura de la persona que también hallamos en Gaudium et Spes nº. 61. Precedentemente esta Constitución Pastoral, del Concilio Vaticano II, en el nº. 3, había señalado que es “la sociedad humana la que hay que renovar. Es, por consiguiente, el hombre; pero el hombre todo entero, cuerpo y alma, corazón y conciencia, inteligencia y voluntad”. Estos son aspectos y ámbitos estudiados también por los grandes pedagogos y psicólogos. El mismo S. Agustín presenta como aspectos de la psique humana: -la memoria, -el entendimiento y -la voluntad.

2. EL DESARROLLO DE SUS TRES DIMENSIONES RELACIONALES: Dios, los demás y el mundo creado que aparecen en la Encíclica Laudato SI’ nº. 210 como los distintos niveles para alcanzar un equilibrio ecológico. Al mismo tiempo, en el nº. 240, señala que “la persona humana más crece, más madura y más se santifica a medida que entra en relación, cuando sale de sí misma para vivir en comunión con Dios, con los demás y con todas las criaturas. Así asume en su propia existencia ese dinamismo trinitario que Dios ha impreso en ella desde su creación. Todo está conectado, y eso nos invita a madurar una espiritualidad de la solidaridad global que brota del misterio de la Trinidad”.